UNA DESINTELIGENCIA DE LA INTELIGENCIA

En las últimas horas se conoció la información que una vecina de General Levalle, en el sur provincial había sido detenida el pasado jueves en horas de la tarde por orden del Juez Federal de Río Cuarto Carlos Ochoa, como consecuencia de un pedido que llegó desde Buenos Aires por supuestas amenazas contra la ministra de seguridad de la Nación Patricia Bullrich.

Mariela Moine de 42 años es madre de un hijo de 11 años y padece de una incapacidad para leer y escribir. No obstante eso estuvo en un calabozo de la Policía Federal de Rio Cuarto, a 145 kilómetros de su hogar, durante 20 horas.

Fernando Moine es hermano de la acusada y contó GEF Informa que dos semanas antes de la detención investigadores estuvieron en el domicilio de Mariela, identificándola y consultado por una persona de apellido Ledesma que supuestamente vivía en ese lugar. «Fue un atropello, una vergüenza lo que hicieron. Somos gente de trabajo y si ven donde vive mi hermana, junto con mi mamá se darían cuanta que ni una onda para tirar puede haber», graficó Fernando.

Audio: Fernando Moine.

Según los familiares a la mujer la tuvieron horas en el Juzgado sin poder explicarle de qué se la acusaba, luego el juez federal de Río Cuarto a las 3 de la tarde del viernes le concedió la libertad. De cualquier manera, el proceso continúa. Habrá que ver su contenido cuando se levante el secreto de sumario.

Trascendió que fue importante la actuación de la Secretaría de Derechos Humanos de la Municipalidad de Río Cuarto, como así también el abogado Daniel Olarticoechea, quien ahora está analizando entablar alguna acción judicial contra el estado nacional.

Hasta el momento todos los «delegados» locales de la funcionaria nacional han guardado silencio ante lo que sería un abuso de poder de su referente.

La actual intendente de General Levalle, Lala Rodríguez Paredes (UCR) fue la primera que acude a la casa de la familia Moine a solidarizarse, cuando se enteró del allanamiento, que duró 4 horas, con la presencia de varios vehículos y efectivos de la Policía Federal. También lo hicieron los ex intendentes Gallo y Goñi.