ASAMBLEA DE MUJERES Y DISIDENCIAS

Con alrededor de 200 participantes, este martes 23 de mayo sesionó en Córdoba la asamblea de mujeres y disidencias convocada por la organización de mujeres Plenario de Trabajadoras. En la misma participaron las candidatas del Frente de Izquierda a Unidad, Soledad Díaz, Cintia Frencia y Silvina Vivas, junto a referentes y activistas sindicales, barriales y de la Asamblea Ni Una Menos.

Soledad Díaz dijo al respecto:  «Hacia el 3 de junio con esta asamblea nos sumamos a la diferentes instancias de organización que viene desarrollando la asamblea Ni Una Menos Córdoba para preparar la multitudinaria movilización que, sin dudas, tendrá lugar en Córdoba y el pais para gritar una vez más, Ni Una Menos, el Estado es responsable. Pero sobre todo, en un cuadro electoral en el que prima el ataque a las condiciones de vida de las familias trabajadoras, y en particular a las mujeres, con el surgimiento de sectores fascistas como el que representan Milei y Villarruel, está asamblea plantó un polo de independencia política y de organización contra esa ofensiva reaccionaria y oscurantista».

«Los antiderechos se montan sobre el fracaso de todos los gobiernos para erradicar la violencia, y y lo hacen sobre la base de negar nuestra realidad. Nuestro movimiento se prepara para retomar el camino de las calles como único método para defender nuestras conquistas e ir por todos nuestros reclamos. Pero lo hacemos con un programa propio, el de las piqueteras, las pibas de la marea verde, las madres protectoras, las docentes, y todas las trabajadoras que enfrentan el ajuste. Para terminar con la violencia y la opresión que nos depara el Estado capitalista hay que echar a los políticos capitalistas y al FMI, y hay que tomar las riendas de una salida en nuestras manos».

«En esta asamblea resolvimos movilizar masivamente el próximo 3J. Pero también profundizar la lucha por un consejo autónomo, electo y revocable por las mujeres y disidencias; la creación de un fuero único especializado en violencia y abuso a menores; la defensa de una ESI laica y científica, la IVE y la separación de la iglesia del Estado. Ese programa solo se puede defender con independencia de los gobiernos y del FMI, con las mujeres en las calles y con la izquierda que se planta».