Sociedad
POLICÍA DE VOCACIÓN, MECÁCNICA DE PROFESIÓN
En una información difundida hoy por la Dirección de Relaciones Institucionales de la Policía de Córdoba contaron: “Es sabido que las mujeres ocupan múltiples roles en la sociedad y en la familia, madres, amigas, compañeras. Detrás de distintas profesiones, la mujer cada vez se va posicionando en ámbitos insospechados y el de la mecánica no es la excepción.
Mabel Ahumada es policía, de jerarquía sargento, con 11 años de antigüedad, madre de 5 hijos; así que más que una mamá, una madraza. Hasta allí, nada fuera de lo “normal” aunque sin duda criar a un hijo es un desafío, ¡cuanto más pensar en cinco!
En lo cotidiano Mabel tiene una función muy especial, su vida está marcada por tuercas, palancas y motores, ya que se desempeña como mecánica, la única en la institución.
Entre sus tareas principales, se dedica al arreglo general de móviles, labor que realiza por la mañana en la División Transporte y por la tarde como coordinadora de Logística de la Dirección de Seguridad Zona Centro.
Todo empezó hace unos años atrás, cuando ella notó que las patrullas de su dependencia algunas veces necesitaban arreglos muy simples como control de fluidos y mecánica ligera, por lo cual, se cargó la tarea al hombro. Allí, su jefe vio el potencial y la puso a cargo del área.
Seguidamente, realizó varios proyectos de capacitación a choferes con el objetivo de contribuir en la reducción de la tasa de siniestralidad.
Asimismo, culminó cursos de reparación, chapa y pintura y auxiliar docente, entre otros, que le dieron la oportunidad de impartir clases de diferentes asignaturas a los alumnos de las escuelas de Oficiales y Suboficiales.
Intrépida por naturaleza, Mabel le inculca a sus hijos la pasión y el servicio al prójimo, tanto es así que uno es policía, otra es paramédica y otra es auxiliar veterinaria.
«Siempre les digo a los estudiantes, a mis hijos y compañeros: cada uno de nosotros es un eslabón y aunque parezca insignificante nuestro valor, entre todos podemos sumar para mejorar» destaca.
Esta suboficial es una trabajadora incansable, en sus palabras «el tiempo no importa cuando uno hace lo que ama» y es que las horas pasan volando, la creatividad fluye, el nivel de felicidad aumenta cuando se hace algo con pasión.
Para llegar a ese punto basta con observar aquello que nos mueve, lo que nos hace levantar de la cama cada día, lo que nos emociona, lo que nos llena de orgullo y nos inspira.
El trabajo no es solo una manera de ganarse la vida, sino un espacio de expresión, la clave está en encontrar ese elemento distintivo para desarrollar las tareas saliendo del modo automático.
Y Mabel sin duda lo halló: solidaridad, compromiso, superación, altruismo y generosidad son las características que la definen”.