Judiciales
POLICÍAS COMPLICADOS
Otros dos policías fueron detenidos este martes, en relación a la causa que investiga el asesinato de Valentino Blas Correas, quien murió tras recibir un disparo por parte de un policía. Se trata de Yamila Martínez y Sergio González, dos efectivos que participaban en un control policial la noche del crimen del joven de 17 años. Los mismos quedaron imputados por “omisión de deberes de funcionario público y encubrimiento agravado”.
De esta manera, ya son cinco los policías que se encuentran detenidos en el marco de la causa que investiga el fiscal José Mana. La policía Wanda Esquivel, quien se encuentra acusada por encubrimiento agravado; y Lucas Gómez y Javier Alarcón, imputados de «homicidio calificado en grado de tentativa» se suman a la lista de aprehendidos.
Por otra parte, el Secretario de la Fiscalía de José Mana que investiga esta causa, Gabriel Prunotto, le dijo a GEF Informa, que también imputaron a tres subcomisarios por “omisión de deberes de funcionario público y encubrimiento en libertad” y se dispuso la imputación de un agente de la División Motocicletas de la Policía, por lesiones leves calificadas tras comprobar que había golpeado y maltratado a Juan Cruz, el conductor del Fiat Argo donde se trasladaba Blas Correas.
Según Prunotto la fiscalía está recibiendo todo el apoyo de la policía para el avance de la investigación.
Debido a esta situación la Policía de la Provincia de Córdoba emitió un comunicado, firmado por el Jefe de la fuerza, Comisario General Gustavo Vélez, donde asume el compromiso “definitivo e inclaudicable con la investigación del hecho hasta su total esclarecimiento”, expresa.
“Es de público conocimiento, además, que se investiga judicialmente la instalación fraudulenta y delictiva de un arma en el lugar del hecho, con la intención de desviar la investigación; esta acción aberrante denigra a la Policía como institución democrática y fundamentalmente lesiona la honra y la dignidad de miles de policías que cumplen cotidianamente con su deber de servir a la comunidad, honrando el uniforme de nuestra Institución.
Este difícil momento, me impone el deber funcional y moral de dedicar cada día de mi gestión, no sólo al esclarecimiento de este conmovedor hecho, sino a esclarecer y desterrar para siempre acciones de esta naturaleza, que no por aisladas dejan de ser gravísimas e intolerables para el Estado de Derecho.
Finalmente quiero reiterar mi pesar más profundo por el dolor causado a las familias involucradas, lo hago en mi condición de Jefe de Policía, ciudadano de mi provincia y padre de familia”, manifiesta Vélez en el comunicado. .